Se eligió la Tasca "La Farmacia", en Capitán Haya, 19.
¡Un acierto!
Es un lugar con encanto, bien iluminado, acogedor y con una decoración preciosa.
Al entrar, te impresiona el salón inspirado en una botica antigua. Las paredes de ladrillo visto y grandes alacenas con los típicos tarros de entonces y el techo es todo una vidriera espléndida.
Tomamos un menú de grupo, en mi opinión, muy bien presentado y cocinado.
Yo elegí pescado (bacalao rebozado y al pil pil) y lo encontré en su punto.
Los camareros, buenos profesionales, solícitos pero no agobiando. La comida resultó fluida, sin atascos ni esperas.
Como dije al principio, " ¡Un acierto!".